Me desnudo no de mis ropas roídas sino de mis recuerdos, de mis pensamientos, de mis pesares, esa carga que me lastima los hombros, que arquea mi espalda y me hace caminar jorobado, esa famosa "cruz" que todos debemos cargar... la quito de mí, la sacudo, la suelto y la tiro... estoy harto!!

Me veo a mí, en ese espejo cuarteado por el medio, a mis 26 años, cargando al vejez del anciano sin la experiencia que dan los años, únicamente con el cansancio en mi andar lento, mi vista cansada, mis brazos pesados, mis esperanzas rotas y mis sueños volando por las quimeras que no puedo alcanzar... sin fuerza, sin energía, sin ganas de seguir, sólo queriendo dormir, y soñar, y esperar que mi respiración se haga tan profunda que se pierda en la inmensidad de las circunstancias, en la cama sobre el suelo que recibe mi cuerpo cada noche, el frío haciendo tronar mis huesos…

Mi cabello empieza a teñirse de gris, mis ojos han perdido su brillo... tengo 26 años!!! Debería ser un hombre entero ¿cuál fue el golpe mortal?

Hoy quiero correr hacia la libertad, quiero abrir mis brazos, quiero ser irresponsable, quiero ser inmaduro, quiero no tenerle miedo al miedo, quiero ser impaciente, quiero dejar de esperar…

Pero no… no puedo volver el tiempo atrás, soy un hombre herido, soy un hombre sin tregua, soy un hombre solo... soy un anciano prematuro, soy otoño en primavera, me estoy deshojando…